
¿Quién es el Trauco? ¿Un hombrecito del bosque que acecha jovencitas para embrujarlas y tener sexo? ¿El padre de niños con un solo apellido? ¿Un ser del que las mujeres deben cuidarse? ¿Alguien a quien los padres temen? ¿Puede ser un violador en el bosque?
El Trauco no es como otras leyendas, no se parece al Caleuche o la Pincoya; este personaje es más que un cuento, es un peligro real del que las mujeres tenemos que cuidarnos todos los días.
Lo cierto es que en cada pueblito y ciudad hay Traucos sueltos. No salgas sola de noche, no bebas de más, no lleves la falda tan corta; todo eso para cuidarnos del Trauco, pero a él no le importa el lugar, la hora o tu ropa. El Trauco podría estar en nuestra casa, quizás ya lo hemos mirado a la cara.
El Trauco es ese hombre que abandonó a su hijo, es el que abusó de ella cuando estaba borracha, es el que la siguió en la calle, es el que la violó y después rompió la evidencia y corrió a esconderse. El Trauco no es solo una leyenda, es un mal real que nos acecha a las mujeres siempre, que nos espera a la vuelta de la esquina, que nos hace cuidar el vaso y nos crea un nudo en las entrañas cuando mi amiga no avisa que llegó a su casa.
El Trauco es violencia de género disfrazada de cuento.
Comentarios recientes